jueves, 12 de mayo de 2022

A tu espada

 


A TU ESPADA

No me olvides.
Desde la fibra
más triste
que vibra
dentro de mí,
te lo imploro.

No te vayas.
Mira,
ya crecieron
las violetas
a la sombra
de mi alma;

son celestes
y azules,
son moradas
y blancas.

Dime tú,
¿porqué callas?
¿porqué tus palabras
se ahogan
con mi llanto?

¿Porqué detienes
tu Palabra,
cincelada
por los siglos
en el mármol,
en la piedra y
en tu Libro Santo?

Yo te espero,
como quien
contempla
el horizonte
con taciturna
mirada.

Yo te adoro,
en tus pasos
que regresan
sobre la muda arena
de mi playa.

Yo te celebro
en este canto,

por la espada
que blandiendo
tu diestra,
trae justicia;

y por la fuerza
de tu extendido brazo.

INGRID ZETTERBERG

De mi poemario
"El árbol invencible"

Derechos reservados
Safe Creative Cta. 1006080193112