DISTANTE Y OLVIDADO
Desde mi soledad
caminas hasta mí
como un claro día.
Y emerges
de mi orfandad eterna
para besar mi sueños.
Distante y olvidado
como un amanecer
de infancia,
como el trino
de un ave,
regresas a mi alma.
Y no sé de donde vienen
ni como suenan
tus pasos.
INGRID ZETTERBERG
Dedicado a mi amado
Señor Jesús
No hay comentarios.:
Publicar un comentario